El proceso del parto
El parto dará inicio con los fetos, la temperatura corporal de la canina ira disminuyendo gradualmente y por lo general, las perras hacen todo el trabajo del parto, sin embargo, a veces por inexperiencia o agotamiento, no completan su labor ellas solas y es aquí cuando se requiere el acompañamiento del medico veterinario. Por esto, es importante que tengas en cuenta las tres fases del parto por las que pasará tu canina:
Fase I o preparación:
Comienza con las contracciones uterinas a intervalos regulares, que se van acortando progresivamente, la vulva se agranda y se pueden observar secreciones mucosanguinolentas. La duración de esta fase es de 6-12 horas, sin embargo, puede llegar a las 24 horas. Durante esta fase notaras a tu canina inquieta, nerviosa, temblores, jadeo, sin apetito, escarbar en el suelo para anidar o para disponer los cachorros.
Fase II o expulsión fetal:
Las contracciones uterinas aumentan con frecuencia, intensidad y duración hasta que el feto es expulsado hacia el exterior a través del canal del parto (vagina). La hembra lame al feto durante la expulsión para estimular su función cardiorrespiratoria y despejar las vías áreas y finalmente desgarra el cordón umbilical con sus dientes. El tiempo estimado durante el inicio de esta fase y la expulsión del feto varía entre 10 – 30 minutos, el esfuerzo activo por más de 30 minutos sin ninguna expulsión será motivo de preocupación y se deberá consultar inmediatamente con tu veterinario. El intervalo de nacimiento entre los cachorros no debe superar las 2 horas.
Fase III o expulsión placentaria:
Esta etapa se repite después de cada nacimiento de un cachorro y se observan contracciones mucho más débiles a través de las cuales se va eliminando la placenta después del nacimiento de cada cachorro. La placenta se suele eliminar entre 5 y 15 minutos después de cada cachorro. La mayoría de las perras consumen la placenta como una expresión de su comportamiento natural de la especie.
Es importante resaltar que, la etapa de reproducción y lactancia es una etapa de alto estrés y se necesitan dietas con unas características muy puntuales: dietas concentradas, con alta palatabilidad y altamente digestible.
El aporte energético será clave en la gestación, específicamente después de las primeras 5 semanas de preñez en la cual ocurre más del 70% del crecimiento del feto y las ultimas 3-4 semanas donde los fetos crecen rápidamente lo que conduce a un aumento de peso corporal del 15 al 25%.
Durante el parto la canina se le deberá brindar un 60% más de alimento con una frecuencia mínimo 3 veces al día. La obesidad puede ser peligrosa y puede causar problemas durante el parto, la nutrición en esta etapa en clave para garantizar embriones de buena calidad y evitar dificultades comunes en el parto como la distocia.
Cuidados de una perra gestante
-Mantenerlas en un buen estado nutricional.
-Aportar calorías extra solo en la segunda mitad de la gestación, a partir de la 5ª semana.
-No vacunar o medicar innecesariamente a las perras gestantes.
-Mantener la cama limpia, cómoda y con insumos de fácil absorción (toallas, papel).
-Espacio tranquilo y calmado, sin presencia de extraños.
-Vacunación al día ya que las madres sanas transmiten su inmunidad a los cachorros en el calostro (primera leche), por lo que es importante asegurar que los niveles de anticuerpos se encuentren en su punto máximo.
-Esquema de desparasitación al día para evitar transmisión de parásitos de la perra a los cachorros.
-Ejercicio: caminatas cortas y regulares.
-Mantener una temperatura ambiental entre 21 y 23°C.
Por último, existe un síndrome caracterizado por un desarrollo mamario y lactación y comportamientos maternales que a menudo puede ser confundido con la etapa de la gestación de una canina denominada Pseudo gestación, pseudociesis o falsa gestación. Se observa en perras enteras (no esterilizadas). El desarrollo de los signos clínicos es variable y puede no darse en cada ciclo.