Debes ser consciente de los niveles de ruido
Ver un partido en casa puede ser ruidoso, ya que entre animar, gritar o escuchar música con tu perro para animar a tu equipo cuando está ganando o perdiendo, el volumen del televisor, los aplausos y pisotones intermitentes, puede hacer que tu perro se sienta ansioso, nervioso y asustado, así que ten cuidado con los niveles de volumen durante el juego. Puede ser mejor dejar que tu perro pase el rato al aire libre o en otra habitación más tranquila lejos de la acción durante el juego.
Asegúrate de que tengan lo que necesitan
En medio de toda la emoción del día del juego, puede ser fácil perder la noción del tiempo. Asegúrate de que tu perro tenga todo lo que necesita para estar sano, seguro y cómodo antes, durante y después del juego. Verifica que tengan suficiente agua y de cumplir con los horarios normales de alimentación, también es importante realizar alguna que otra caminata antes y en la mitad del tiempo muerto del partido, esto quitará sus niveles de ansiedad o aburrimiento si lo de ver el fútbol no es la actividad favorita de tu perro. Si lo encierras durante el juego, asegúrate de que tengan acceso al agua y que se mantengan en una habitación tranquila para evitar causarles ansiedad.
Considera la guardería para perros
Para los perros ansiosos, tímidos o que no se llevan bien con los ruidos fuertes y los ambientes emocionantes, considere la posibilidad de una guardería para perros. Si asistirás a un juego en persona, incluso podrías considerar la posibilidad de alojar a tu cachorro en una guardería canina, es un servicio beneficioso para el cuidado de mascotas que brindara a tu perro un cuidado profesional en un entorno cómodo y seguro durante un corto período de tiempo.
Abstenerse de maldecir
Los deportes pueden estar llenos de suspenso, emocionantes, pero a veces también frustrantes, y a veces, al expresar esa frustración, podemos lanzar algunas bombas, desafortunadamente, esto no suele funcionar muy bien con los perros. Sabes qué le estás gritando al árbitro por hacer una mala decisión, pero tu canino no lo sabe y puede suponer que estás molesto con él. Los perros también son maestros en leer el lenguaje corporal, por lo que a veces pueden saber cuándo estamos molestos simplemente analizando nuestra postura física y acción.
Si se hace una mala decisión o jugada, considera retirarte y regresar cuando estés calmado. Tal vez incluso traigas una golosina para tu perro y olvidar por qué tanto alboroto.