Infecciones secundarias

Las almohadillas son susceptibles a lesiones debido al contacto continuo con el suelo. Cualquier herida, grieta o úlcera puede convertirse en un punto de entrada para infecciones, incluyendo las causadas por hongos.

Inmunodepresión

Los perros con sistemas inmunitarios debilitados, como cachorros, perros mayores o aquellos con enfermedades inmunosupresoras, son más propensos a desarrollar infecciones fúngicas.

¿Cómo identificar si mi perro tiene hongos en las patas?

Los síntomas de hongos en las almohadillas incluyen:

• Pérdida de pelo: Especialmente en las almohadillas.
• Piel descamada: Con escamas blancas o negras.
• Enrojecimiento: La piel se ve irritada y enrojecida.
• Picazón: El perro se lame o muerde las patas constantemente.
• Olor desagradable: Las infecciones fúngicas a menudo tienen un olor característico.

Dog Lover, si notas alguno de estos síntomas, es importante llevar a tu perro al veterinario para un diagnóstico adecuado.

Tratamiento de los hongos en las almohadillas de los perros

El tratamiento para los hongos en las almohadillas incluye:

• Terapia antifúngica: Puede ser sistémica (medicamentos orales) o tópica (aplicaciones locales). Los medicamentos sistémicos suelen ser más efectivos y rápidos, pero los tópicos también ayudan a reducir la contaminación ambiental.
• Mantener las almohadillas limpias y secas: Es vital para favorecer la curación.
• Desinfección del ambiente: Limpiar con lejía diluida (1:10) y aspirar frecuentemente las áreas donde duerme tu perro para eliminar esporas.
• Separación de otros animales: Si tu perro convive con otros, es mejor mantenerlos separados hasta que termine el tratamiento para evitar contagios.
• Medidas de higiene: Lavarse las manos después de tratar a tu perro y usar guantes desechables.

Si ves que tu perro tiene almohadillas rojas o alguna herida, es fundamental acudir al veterinario para un diagnóstico preciso.

Cómo prevenir hongos en las almohadillas de tu perro

Prevenir los hongos en las almohadillas es esencial para el bienestar de tu compañero canino. Aquí algunos consejos:

• Mantén las almohadillas secas: Sécalas bien después de paseos por lugares húmedos o después del baño.
• Evita el contacto con animales infectados: Si sabes que otro perro tiene hongos, mantén a tu perro alejado.
• Mantén una buena higiene: Limpia regularmente las áreas donde tu perro duerme y juega.
• Fortalece su sistema inmunitario: Proporciona una dieta balanceada y considera suplementos si es necesario.

Cuidar de las almohadillas de tu perro es esencial para su salud y bienestar general. Mantenerlas limpias y secas, vigilar cualquier síntoma de infección y actuar rápidamente ante cualquier signo de hongos son pasos fundamentales. Recuerda, prevenir es un acto de amor y cuidado hacia tu compañero leal.